lunes, 26 de junio de 2006

Peligro

Un peligro para México

¿Qué quieren, si no lee?

-Rami Scwartz-

 


Vicente Fox es un peligro para México. Comparado con él, López Obrador es una blanca paloma. Y es que no hay nada más peligroso que un Presidente de la República firmando papeles que no lee, promulgando leyes que no revisa, heredando problemas que no conoce. Eso es lo más peligroso que me haya tocado atestiguar en mi corta carrera como analista de la realidad nacional.

 


Lo primero que uno aprende cuando se llega a edad adulta y se adquiere personalidad jurídica es a leer lo que se firma. Cuando uno estampa su firma en un documento, se adquieren compromisos y obligaciones que es importante conocerlas a cabalidad. Si se es Presidente la cosa se pone peor, pues su firma no solo lo compromete a él, sino a todos los mexicanos.

 


Resulta que tanto la Secretaría de Comunicaciones y Transportes como la Comisión Federal de Telecomunicaciones y la de Competencia, enviaron sendas recomendaciones al asesor jurídico de la Presidencia de la República advirtiéndole sobre serios problemas en la nueva ley de radio y televisión, recomendaciones que Fox simplemente no leyó. Se le advirtió que varios incisos de la ley eran anticonstitucionales, que atentaban contra la libertad de competencia en ese sector, que configuraban un monopolio de facto inquebrantable y que se estaban entregando recursos que pertenecen a toda la nación a un puñado de particulares. Fox ni siqiiera se tomó la molestia de leerlas: simplemente estampó su firma y al hacerlo no solo se
comprometió él, sino que nos comprometió a todos los mexicanos.

 

En aras de favorecer a sus amigos Emilio Azcárraga y Ricardo Salinas, Vicente Fox decidió sacrificar el interés de 105 millones de mexicanos. No importó que toda la opinión pública se haya volcado en contra de la contrareforma a la ley de telecomunicaciones, no importó que las cámaras del ramo se hubiesen manifestado en contra, no importó que los diputados hayan interpuesto un recurso de inconstitucionalidad, no importó que su mismo partido, el PAN, en voz del senador Javier Corral, Presidente de la Comisión de Telecomunicaciones, hubiese presentado estudios muy serios del daño estructural que se hacía al país promulgando esta ley. El presidente que no lee, tampoco escuchó,
y decidió hacer buenos sus compromisos de campaña con Televisa y TVAzteca.

 

Y así, contra viento y marea, contra la SCT, contra la Cofetel, contra la CFC, contra la comisión de telecomunicaciones de la cámara de diputados, contra la cámara de la industria de la radio y la televisión, contra el sindicato de trabajadores de radio y televisión, contra la opinión pública, en fin, contra todos, Fox convirtió en ley una bola de papeles de baño usados, les estampó su firma, sin haber visto siquiera que se trataba de eso: papel sanitario.

 

Obviamente Fox no va a poder nominar a los consejeros de la nueva y debilitada Cofetel. Asumiendo que los diputados y senadores aprueben las recomendaciones que Televisa y TVAzteca hagan en boca del Presidente, no van a tardar en renunciar. ¿Para qué formar parte de una institución que no va a tener poder, que va a ser manipulada al gusto de las dos televisoras?. Solo si los consejeros cobran en la nueva Cofetel además de Televisa y TVAzteca, van a tener incentivo de quedarse, así al menos se van a poder hacer millonarios y no ser meras figuras decorativas. Y yo me pregunto, ¿qué hubiese pasado si la ley hubiese contemplado fusilar a 100 mexicanos cada día en frente de las cámaras de Televisión?. ¿Hubiese firmado Fox la ley y la hubiese publicado en el Diario Oficial?. Seguramente sí, porque no las hubiese leído.

 

Todo lo que hubiesen tenido que hacer Televisa y TVAzteca es solicitarlo y Fox los hubiese mandado al paredón. Por ello es que Fox es infinitamente más peligroso para México que López Obrador, Madrazo y Calderón juntos. Al menos a mi me consta que ellos tres sí leen, Calderón hubiese revisado minusciosamente la ley, coma por coma, porque no en balde es abogado. Madrazo hubiese hecho lo propio, además de designar a todo un cuerpo de asesores para desmenuzarla. Y López Obrador seguramente hubiese quierido meter su cuchara y hacerle los cambios necesarios para asegurarse que es en beneficio de “los pobres”. Pero Fox no.
Probablemente si se lo hubiesen ilustrado con monitos y lo hubiesen hecho comix lo hubiese ojeado, como seguramente hizo con las historietas de su enemigo López Obrador. Pero eso de andar leyendo textos, sin fotos y sin dibujitos no es lo suyo, nunca lo ha sido...

 

Fecha: 2006-06-26 15:00:02

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(http://www.mexico.com/lapalabra/index.php?method=colaborador&idcolaborador=64)


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